Dispensación de medicamentos:
Las farmacias venden medicamentos recetados por médicos y medicamentos de venta libre, garantizando la calidad y seguridad de los productos.
Preparación de fórmulas magistrales:
En algunas farmacias, los farmacéuticos pueden preparar medicamentos personalizados, adaptados a las necesidades específicas de cada paciente.
Asesoramiento farmacéutico:
Los farmacéuticos pueden brindar información sobre los medicamentos, sus efectos secundarios, interacciones con otros medicamentos y cómo utilizarlos de manera segura.
Venta de productos de salud:
Las farmacias también pueden vender productos de higiene personal, cosméticos, productos para bebés y otros productos relacionados con la salud.
Promoción de la salud:
Algunas farmacias ofrecen programas de salud, como campañas de vacunación, pruebas de detección de enfermedades y consejos sobre hábitos saludables.
Atención farmacéutica:
Los farmacéuticos pueden brindar atención farmacéutica, que incluye la identificación de problemas relacionados con la medicación, la monitorización de los resultados de la terapia y la colaboración con otros profesionales de la salud.